viernes, 1 de junio de 2007

GDV (gracia dio e vierne)

El lunes empecé enfermo y terminé el hormigonado de la concha de tu madre, con cinco camiones de cemento maniobrando entre cinco personas y dos carretillas, con un frío de la reputisima, rechinándome los huesos hasta el mismísimo centro del ojete. Se paralizaron las obras hasta tener el plano de la putísimamadre que te parió. (me río mucho escribiendo esto, me lo merezco, la semana fue fatal).
A la noche, achuchado de frío me reuní con el Directorio en Dilatorio al 400. Stop. Todos los temas a silencio de radio.
Martes, fiebre. Salida obligada a las 16hs porque iban unos posibles clientes y muebles varios provenientes del chaco. Paseaban los pingüinos. Obviamente llegaron los dos en el exacto momento. Muestro las instalaciones con la ultima helada luz de la más fea tarde nublada de otoño, desplegando multimedia y la lista del queda por hacer. Mi mamá llama 3 veces durante la entrevista, me deja 2 mensajes y en la última la atiendo, solo para decirme que no encuentra las llaves de su auto, pero que estaba viniendo. No sé si llegué a fidelizar al cliente, creo que no.
Llega mi mamá, bajamos los muebles, me desliza que hablan con mi papá de que me perdieron, que no les doy bola, que me alejé. Me faltaba alguna carga familiar en mi cóctel.
Paso por Falabella a ver si en una de ésas me solucionan el típico problema de empresa multinacional que se caga en la post-venta y la puta que te parió, con empleados subnormales programados para emputecer lo mas posible la relación al cliente. Pierdo una hora. Nada. Tengo fiebre. Cena con amigos cancelada.
Miércoles. Duermo muy mal. Voces que me hablan entre sueños y me dicen que hacer, como soltar el nudo, delirios de temperatura. A la mañana me siento mejor. Mi viejo me invita a navegar y digo que si para que me aflojen la cuerda del abandono, pero debería quedarme en cama. Me abrigo hasta los dedos gordos y disfruto de un paseo técnico calibrando GPS con cartas de navegación y volvemos con yeneaker y el sol de la tarde en la cara. Hablamos un poco de los temas que me competen de la mierda calentita del nono. Vuelvo a casa, amargo prime, a dormir temprano.
Jueves. Día gris, húmedo, frío como café olvidado por otro, ideal para que los taxistas puedan decir “lo que mata es la humedad, te cala los huesos”. Un anti día. Me voy a Tortuguitas a hacer un mandado para la suegra. Aprovecho y voy a la puta que me parió, a ver como fragua el hormigón. Ruedan los pingüinos adentro de sus respectivos rolitos, chocando entre sí, como patinando por un sueño. Mi sueño. Todo parado, sin definiciones. Soy una estalagmita. Paso por Falabella nuevamente. Le pongo mucha garra, le muestro soluciones posibles a la analfabeta troglodita de Desatención al cliente. Un problema de dos, al menos.
Vuelvo a casa temprano, hermano, nada salió como lo esperaba. Quiero prender fuego todo, quiero colgar a un chivo expiatorio, quiero no rendirme, pero las voces me dicen que un chico de mi capacidad perdiendo el tiempo con la concha de tu hermana. Después me metí en un freezer para ponerle fichas a las palomas de la plaza.

Yo no quiero bajar los brazos, estoy tan cerca del arco iris.

Pero con alguien me tengo que agarrar para hacer esta digestión, porque anoche todo esto hervía sin termómetro. Así que le vomité todo a mi señora, como tirando tomates podridos contra una pared.

Hoy me despertó con un beso y se fue a trabajar. Me levanté, me bañé, hice un brunch con tostado, café, milanesas de otra noche y salchichas vencidas. Estuve separando las puntas de estos hilos.

Yo no te digo las cosas que te digo para lastimarte, te las digo para que me ayudes.
Que me ayudes no es un pedido de auxilio, necesito terminar este proyecto.
No lo puedo abandonar en el medio, estamos demasiado cerca como para autocumplirnos el fracaso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Falta muy poco, Sami, muy poco.

Anónimo dijo...

SPARTACUS. Una historia de Sexo, Poder y Videos

“De los Apeninos a los Andes..., con nuestro Conductor de T.V. Estrella.”

Su apellido remite a una cadena montañosa muy alta y su cara es, sin duda alguna, una de las más lindas de la T.V. argentina.

Guillermo Andino nunca vino a Spartacus, pero sí pedía lo que se llama Delivery (a domicilio) con diversos nombres a fin de despistarnos. Se imaginan que, cuando un Taxi volvía después de semejante encuentro, sentía que le había pasado poco más que lo MÁXIMO. Un disparate: además de ser pintón, PAGABA. Sería como el equivalente femenino de Sharon Stone para mi o para usted, si es hombre, o como cualquier Galán de moda para su esposa o pareja. Claro, el que debe comprender bien este asunto es el lector que pertenece a la comunidad Gay, que ha convertido a Guillermo Andino en un oscuro objeto del deseo....

Cómo procede Guillermo Andino:

Llama reiteradamente solicitando servicios hasta el año 96. Después de ese año, no vuelve a haber rumor alguno en el prostíbulo sobre sus llamadas. Hasta entonces su accionar siempre es muy parecido: recibe al modelo algo tomado.... Le gusta sobremanera masturbarlo y que le den masajes. De características sexuales tranquilas lo que hace es más un manoseo que otra cosa. Convida con gasesosa, habla muchísimo y.... Y NAAAAAAADA MAAAAAAAS!!!! Es bastante aburrido, mis queridos lectores.

Si los decepciono, discúlpenme, pero este es así, de lo más BOLUDO.

Publicado en el Libro SPARTACUS
Autor: Luciano Garbellano
Edit. BALBI S.A. – 3ª edición. 2002

A PARTIR DE 1997 GUILLERMO ANDINO SE DEDICÓ A LLAMAR A AMIGOS ÍNTIMOS, PERO SIGUIÓ Y SIGUE CON SUS PRÁCTICAS SEXUALES, A PESAR DE HABERSE CASADO PARA “DISIMULAR” Y CUIDAR IMAGEN.