Orine sentado

Recientes estudios de la Universidad de Garomponia publicados en la revista Inodoros del mes de octubre, demuestran que para los hombres con pitulín el mear sentado hace bien a la salud y a la higiene hogareña y personal.
Según esta prestigiosa publicación, el mear sentado reduce al mínimo el estres de la vejiga y de la próstata en el proceso de meado, además de permitir hojear un panfleto mientras evacua sus aguas.
El efecto del meado sentado masculino conyevaría los siguientes efectos positivos para con el medio ambiente (por año): se utilizariían 120 millones de litros menos de desodorizantes para pisos ya que quedaría suprimido todo chorro salpicador que no es correctamente vertido dentro del excusado, 200 millones de toneladas menos de jabón en polvo, ya que se evitarían 700 millones de litros de orin vertidos en los calzoncillos por el conocido efecto platón de la última gota en el pantalón. Ademas, se ahorrarían cien mil millones de litros de agua potable ya que los productos anteriores se mezclan con agua y existe cierta gente que luego de mear se enjuaga un poco las manos para sacarse el olor a bola que queda luego de sacudir al compañero orinador, cosa que se evita si uno se sienta a mear.
Además, el mear sentado mejora en un 83% por ciento la relacion conyugal porque no suscita discuciones del tipo "me orinaste toda la tabla y la pu... que te parió" y tambien mejora el tránsito intestinal porque "ya que estoy aqui sentado me tiro unas cintas".
Contrariamente a lo que el vulgo pensaría, mear sentado no consume más tiempo de que su versión parada, pero hablando de cosas paradas, mejor mear sentado ya que se tiene mucho más control sobre el chorro desbocado.
Empiece hoy mismo. En pleno enero la revista Gente lo va a publicar como lo IN del momento en Punta, pero usted ya va a venir con ese charm parsimonioso, ese glamour relajado, el halo de la felicidad que le otorga el mear sentado.